CUANDO AHORRAR MATA
Crisis en la provisión de medicamentos de alto costo en la
obra social bonaerense
En la ejecución de los presupuestos de IOMA, la gestión de
María Eugenia Vidal decidió demostrar su eficiencia, limitando el gasto del
Estado. Esta determinación, con una clara relegación de las razones sanitarias,
dejó sin respuestas a distintas situaciones de salud de las familias de los
trabajadores bonaerenses, sin sensibilidad alguna ante enfermedades
catastróficas.
Dichas enfermedades, como el Cáncer, Diabetes del tipo I
(Insulino dependiente), HIV, Esclerosis múltiple, entre otras, reciben la
cobertura del Plan MEPPES, que se encarga de dar respuestas a los medicamentos
de alto costo, ya que ninguna familia puede afrontar los costos de las
medicaciones para estas patologías.
La Seguridad Social en la Argentina siempre ha tenido
organizados distintos mecanismos que garantizaban la atención para que aquellos
enfermos puedan afrontar los distintos costos pero el IOMA, como obra social
masiva de la Provincia de Buenos Aires, desarrolló su propio sistema, que
siempre fue prioritario para las distintas gestiones, ya que la vida de las
personas queda atada a la medicación que propina el mismo.
En cuanto al sistema implementado que tiene el IOMA,
consiste en la compra directa a laboratorios o droguerías aquellas medicaciones
de alto costo que cubren los tratamientos de pacientes que padecen enfermedades
catastróficas, como así también la logística de distribución donde las
farmacias solo dispensan el medicamento, sin ninguna intervención de la compra.
Los farmacéuticos reciben un pago por la dispensación pero no son los
responsables del stock de estos productos.
A pesar de que IOMA es un ente estatal que debería mostrar
sus balances y gastos, muy pocas veces salió a la luz el valor del gasto de
IOMA MEPPES y hoy nos encontramos con una carta realizadas por las cámaras de
la industria con fecha octubre de 2019, en la que reclaman la deuda surgida de
un blanqueo del monto facturado por los mismos que asciende a $2.123.454.189,06.
Esta gran deuda económica expresada por la industria nos
lleva a realizarnos distintas preguntas, como por ejemplo: ¿quién es el
encargado de auditar dichas compras? ¿Cómo es la modalidad en la que se compra?
¿Quién autoriza cada transacción que se realiza y de qué manera se lleva a
cabo? o ¿cómo se define y se priorizan las compras?
IOMA es un ente autónomo y por estatuto tiene sus propios
fondos, pero durante la gestión de Vidal no pudo disponer de ellos para cumplir
con las necesidades de la calidad de vida de los trabajadores, quedando
supeditado a los ajustes del presupuesto que definieron otras carteras, como en
este caso el Ministerio de Economía de la Provincia.
IOMA es la obra social de todos los trabajadores del Estado
de la provincia, con un modelo solidario donde el que más gana, más aporta,
garantizando la equidad todos para que todos reciban la misma prestación. Esta
situación llevó a que no se priorice la función para la cual fue creada, el
enfoque sanitario y la salvaguarda de la salud de los trabajadores del
Estado.
Los bonaerenses que necesiten este tipo de tratamiento van a
tener que reclamar a las autoridades del IOMA y a la gestión de Vidal el
abandono de su posibilidad de atender sus dolencias.
MOVIMIENTO POR EL DERECHO A LA SALUD - MDS
5 de diciembre de 2019
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